La irrupción de la pandemia hace ya dos años detuvo la línea ascendente que el número de solicitudes de protección internacional en Euskadi venía dibujando desde 2014. Si ya en 2020 las peticiones tramitadas cayeron un 36,1% con respecto a 2019, en 2021 el descenso aún fue más acusado y llegó a un 44,1% menos sobre el ejercicio previo.