La imagen que Occidente tiene de la mujer en la mayor parte de los países islámicos, sometida a una férrea interpretación del Corán y a los presupuestos de una sociedad machista, han quedado parcialmente desenfocada con la proyección, ayer en el festival de Valladolid, de sendas películas árabes. “Ser mujer no es nada fácil en ningún punto del planeta tierra, pero es algo fascinante”, afirmó la directora iraní Ida Panahandeh al término de la proyección de Nahid, su primer largometraje, que ha concursado dentro de la sección oficial de la 60 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci).