La edad, el género y el origen pesan más que nunca a la hora de trazar el perfil del sector que se desliza por la pendiente de la exclusión social en Gipuzkoa. Mujeres migrantes y jóvenes sin hogar son los dos colectivos que con más frecuencia llamaron el año pasado a las puertas de Cáritas en el territorio. Y ocho de cada diez solicitantes de ayuda son de origen extranjero. Son en total 17.213 personas atendidas durante el año pasado, con un incremento de casi 2.000 personas respecto a 2021.