El contacto personal y directo es la mejor forma de romper los estereotipos y prejuicios y mejor si es reunidos en una mesa de comida multicultural. En Errenteria la celebración de Bizilagunak, la iniciativa que reúne a personas de diversos orígenes con personas locales para propiciar su acercamiento, se llevó a cabo este domingo. Se realizaron 10 comidas donde se juntaron grupos de familias de distintos orígenes, familias locales y familias de ocho nacionalidades diferentes: un total de 72 personas.
Gerardo Carrere, coordinador de SOS Racismo en Oarsoaldea, menciona al respecto que «siempre es un éxito que todos los años consigamos juntar a tantas familias, no solo por lo que supone de experiencia personal para quien participa, sino, también, como un ejemplo hacia el conjunto de la sociedad, es una apuesta por la convivencia y una sociedad integradora».